jueves, 7 de enero de 2010

En Barranquilla, hombre asesina a su ex esposa y aducen trastorno neurótico obsesivo compulsivo

Acabo de escuchar en Radio Isla 1320 el relato del ex presidente del Senador Charlie Rodríguez sobre como presenció los hechos precedentes al vil asesinato de su cuñada, Clarena Piedad Acosta. No hay dudas de que el hombre en cuestión asesinó a su esposa pero en una extraña situación la fiscalía lo liberó por entender que padecía de trastorno neurótico obsesivo compulsivo.....los celos como defensa.




SUCESOS Le disparó en la cabeza

Asesina a su mujer en Barranquilla en Nochevieja y lo dejan libre

El matrimonio en foto de archivo.  El Tiempo

El matrimonio en foto de archivo. El Tiempo

  • El hombre se declara culpable y la Fiscalía lo deja en libertad
  • La Justicia aduce problemas de trastorno neurótico obsesivo compulsivo

El crimen no podía ser más cruel. Samuel Enrique Viñas Abomhor, colombiano de 45 años, aceptó la invitación de su ex esposa Clarena Piedad Acosta de 43 años de pasar Año Nuevo al lado de sus dos hijos.

La mujer pretendía unir a la familia y por esto ubicó una residencia sobre la carrera 59 con calle 86 del barrio Riomar de Barranquilla hasta donde llegó el empresario de ropa. Lo que no imaginó la diseñadora era que su plan terminaría con su vida.

Allí en medio del licor de la noche, Viñas Abomhor, comenzó atacarla verbalmente y aprovechó el encuentro familiar para demostrar con pruebas en mano que su ex pareja pretendía viajar a Italia a encontrarse con su nuevo amor.

Los acompañantes se miraban entre ellos y prefirieron guardar silencio. El enfurecido hombre pidió a sus hijos retirarse de la casa y minutos después se escucharon tres disparos en la habitación: uno terminó en el techo y dos en la cabeza de su ex esposa, quien murió en el lugar de los hechos.

De inmediato, los invitados llegaron hasta el cuarto e intentaron abrir la puerta, pero fue imposible. El barranquillero lloraba desconsolado y decía que solo los dejaría ingresar cuando llegara la Policía.

“De acuerdo a sus declaraciones estaba cegado por los celos, había encontrado unos correos electrónicos confidenciales donde la mujer intercambiaba mensajes sentimentales con un italiano y eso lo llevó a reclamar airadamente en momentos en que había ingerido licor”, dijo un uniformado de la Policía que pidió reserva de su identidad.

EL MUNDO.es logró establecer que la pareja de esposos estaba separada luego de sobrellevar 20 años de matrimonio. Por esto, el comerciante colombiano había sido tratado por psiquiatras porque no podía superar la soledad.

Lo curioso y lo que ha generado indignación en el pueblo barranquillero es que el autor del asesinato fue dejado en libertad -tras declararse culpable-, por el fiscal décimo de la Unidad de Reacción Inmediata, Edilberto Corredor. La razón de la Justicia radica en que el hombre tiene problemas de trastorno neurótico obsesivo compulsivo.

En Colombia la acción del Juez ha sido tan cuestionada que los clientes de las tiendas de ropa ‘Laura V’ (empresa de la pareja de esposos en la Costa Atlántica), optaron por no volver a comprar en rechazo al asesinato y la libertad del responsable.

Frente al crimen, los cibernautas también se han pronunciado. Familiares y amigos de la víctima abrieron un grupo en la red social Facebook exigiendo justicia frente al asesinato. A la página se han sumado cerca de 1.000 colombianos indignados.

“Él siempre dijo claramente: ‘si ella me deja, yo la mato”, dice una de las cartas que aparecen en Facebook.

Negocios

La pareja consiguió a lo largo de su unión convertirse en dueña de la cadena de almacenes Laura V, la cual creció hasta tener locales en Barranquilla, Cartagena, Santa Marta, Montería, Bogotá, Medellín, Ibagué, Armenia y Panamá, con planes de abrir otros más en Venezuela y Estados Unidos.

De la vida matrimonial quedaron tres hijos huérfanos: Samuel David, Felipe y Laura, ésta última acababa de llegar de Londres, donde reside actualmente. La víctima fue sepultada, el culpable está libre.

Nota publicada en : http://www.elmundo.es/america/2010/01/04/colombia/1262623253.html

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