miércoles, 27 de marzo de 2013

Sucede que a veces me encuentro con Ismael... (revisitado)

El 19 de marzo de 2005 escribí "Sucede que a veces me encuentro con Ismael" en mi primer blog "...al borde del camino", el cual ahora es personal y privado. Ya para ese entonces había cumplido el sueño de ver alguna presentación de Ismael Serrano en directo. Fue en un impresionante concierto en Homenaje a los Republicanos. Allí él compartió escenario con Ana Belén, Pedro Guerra, Victor Manuel, Luis Pastor.... el camino hasta el concierto lo recuerdo largo, pues era en las afueras de Madrid. Pero mis amigos y yo nos divertimos durante el trayecto. Así, escuché por primera vez en directo "Papá Cuéntame Otra Vez" que, a su vez, fue la primera canción que escuché de Ismael en el 2002. Aquí lo pueden ver cantando Al Bando Vencido.

 Más tarde, para mi completa emoción las productoras de Producciones Luna Nueva trajeron a Ismael para su primera presentación en Puerto Rico. Y ya se acerca el anhelado regreso en una de las salas más hermosas de nuestro país.


 Por lo pronto, me saco todas las emociones del sistema, y vuelvo a publicar un fragmento de lo que escribí sobre Ismael Serrano, cuando yo apenas tenía 24 años. Ahora que tengo 32 años, lo leo, y aunque me reconozco, me doy cuenta de que soy una mujer distinta. Y sé que Ismael es un hombre y un artista distinto también. Sus canciones delatan todo. Ahora...

Ahora que pago las facturas, que me besé en La Habana, 
que sueño con Lacandona, que ya no escribo cartas, 
que cumplimos más añós que promesas, 
que se hunden nuestros corazones como la vieja Venecia, 
que llego tarde a los cines y al fin del planeta, 
que alquilo un pequeño piso en un castillo de arena.

Ahora que duelen las resacas y cortan como una navaja. 
Ahora que nadie nos saluda por los bares de Malasaña, 
que pido auxilio, besos y comida por teléfono, 
que fumo flores y lloro a veces mientras duermo. 
Ahora que tiemblo como un niño abandonado. 
Ahora que viejos amigos nos han traicionado.

Ahora es el momento de volver a empezar, que empiece el carnaval, 
la orgía en el Palacio de Invierno, de banderas y besos. 
Se cayeron mis alas y yo no me rendí, 
así que ven aquí, 
brindemos que hoy es siempre todavía, 
que nunca me gustaron las despedidas.

-Ahora (2002) Ver video.

Muchas de las interrogantes de entonces han sido contestadas. Pero, como se dice por ahí, una vez tenemos todas las respuestas, nos cambian las preguntas. Por cierto, su Buenos Aires 2001 me acompañó todo el tiempo que estuve en esa ciudad que él ama tanto, igualmente sus canciones estarán a mi lado cuando este próximo 10 de mayo yo recorra las calles de México D.F. mientras él deleita a mucha de mi gente amada en su concierto en Puerto Rico. Cuando lo miro así, duele menos la idea de no estar presente.


Sucede que a veces me encuentro con Ismael...



Le conocí, en mi segundo semestre de Derecho. El primero había comenzado bien pero había terminado algo mal. Ya en el segundo conocía a Karilix y recuerdo haberle comentado algo sobre este chico que decía que había que brindar por los fracasos del amor. 


El día menos pensado Ismael aparecía en mi vida con una nueva canción en las que me decía "no estarás sola". Pasara lo que pasara, los encuentros y los desencuentros vividos, , Isma me acompañaba, bebiendo un vinito, o un tequila de esos malditos, llorando conmigo, mientras me contaba historias de Tinduf, Santiago de Chile, Ciudad de México ... e invitándome a creer que otro mundo era posible.



De Ismael se ha dicho que está obsesionado con el pasado.... yo lo que veo es a un chico, que como yo, un día abrió los ojos, se dio cuenta que el mundo es lo que es pero que no por eso dejó de luchar. Entonces, usó la canción como vehículo para expresar sus miedos, compromisos y manías como una manera de llegar a más gente y permitir que más gente llegara a él. Lo que comenzó como un experimento en garitos madrileños, entre poca gente, se ha convertido en un gran proyecto que nos convoca a miles de personas de diferentes países. Y lo de proyecto no va en plan político. Se me antoja más con un proyecto emocional, una red de solidaridades, de gente que ha conocido la soledad (que sólo se conoce cuando quieres de buena manera a quien no te quiere, cuando te das cuenta que nadie comprende porque te indignas ante un hecho que ocurre a miles de kms de distancia, o cuando te detienes frente a un semáforo que marca rojo y te pones a llorar, sin pausa, porque el tio que está pidiendo dinero en la esquina está más solo que tú) y que, a pesar de sentirse irremediablemente atada a  esa soledad, se resiste, y busca enlazar con otras personas. 


Ya son dos años encontrándome con Isma todos los días (no siempre bebemos, eh). En ese tiempo, él ha publicado dos nuevos discos, ha firmado un libro sobre la paz y solidaridad después de los atentados del 11-M, ha homenajeado a los republicanos y hasta se ha casado (¡que fuerte!). En ese tiempo, yo he conocido seres imprescindibles para mí, he madurado, he representado legalmente a tres personas agradecidas, estoy a punto de graduarme... y hasta viajé a Madrid para conocer el "km.0" en Puerta del Sol y entonces comprender que el inicio de la carretera de la vida se da día a día con pequeños y grandes detalles. Han pasado muchas cosas y todavía estamos juntos. El en su Madrid... como siempre, Isma me ha regalado una canción que, a ratos, me rescata....... "sucede que a veces", un amigo me llama y me dice que me extraña, una niñita desconocida me lanza un beso, me río tanto que me duele el estómago, un mesero me regala un postre, una persona lee un libro sólo porque se lo recomendé, Drexler canta su canción luego de ganar el Oscar, una chica me comunica que "ahora ve todo diferente" luego de una charla sobre mujeres.... esas cosas que son especiales, precisamente, porque sólo a veces suceden, me obligan a reconciliarme con la alegría, a inventar formas y maneras que me permitan irme contigo a rincones que se esconden más allá de Orión.... con la música de Ismael acompañándonos en el viaje.

domingo, 17 de marzo de 2013

Regalito Dominguero



Sol y Canto se presentará el próximo 26 de marzo en Kantares Ave. Churchill a las 8:30 pm.

Allí les veré!

sábado, 2 de marzo de 2013

Las familias y los tiempos


2 de marzo de 2013
MADELINE ROMÁN
Hubo un tiempo en que el sistema democrático prevaleciente no consideraba legal ni legítimo conferirle derechos a los negros y hubo también un tiempo en que el sistema democrático prevaleciente no consideraba legal ni legítimo conferirle derechos a las mujeres.


La decisión del Tribunal Supremo de Puerto Rico de no permitirle a una mujer adoptar a la hija biológica de su compañera tiene que ser objeto de profunda consternación para todos aquéllos que, reconociendo esa errada trayectoria política y jurídica sean capaces de reconocer en este caso la vida mas allá de lo que ha sido y sigue siendo la desprotección de la ley.


No hay un tipo único de familia. Familias hay muchas y muy diferentes. Este reconocimiento lo hacemos frente a lo que están siendo las vidas singulares de amplios sectores poblacionales del planeta entero. El derecho tiene que tomar nota de esto.


Dice el filósofo español Fernando Savater, que el asunto más neurálgico de las democracias modernas tiene que ver con los derechos de las minorías y los derechos de la diferencia. Para Savater, la tarea política y jurídica más importante en estos momentos consiste en ampliar el conjunto de libertades efectivas de los sectores que aún los disfrutan sólo de modo minusválido. Lo más fácil es no reconocerle derechos al otro cuando uno está cómodamente instalado en el disfrute de los de uno. Pero la justicia tiene que ver con la relación con el otro, con el respeto a la singularidad del otro. Es preciso conectarnos con esta maravillosa idea de que la vida humana toma muchísimas formas y que la tarea del derecho es conferirle valoración jurídica a ese reconocimiento.


La madre biológica de esta niña quiso darle un rostro a esta problemática profunda compareciendo ante los medios, trayendo de esta manera a nuestra reflexión el planteamiento del filósofo francés Emmanuel Levinas en torno a que el rostro del otro nos obliga, nos impone una responsabilidad ética para con el próximo (vecino, amigo, colega, hermana o hija) cuya vida es distinta de la mía y de mi sistema de creencias. Al asumir esa responsabilidad ética (e histórica) nos crecemos como sociedad y como personas.

*Columna publicada hoy en El Nuevo Día.