II JORNADA BLOGUERA DE NO MAS VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES
Prof. Nereida J. Rodríguez
UPR Bayamón
Desesperanza, incertidumbre, desosiego y sufrimiento nos embarga ante el abuso y la pérdida de mujeres, niños y niñas en circunstancias oscurecidas por el desenfreno. A diario, se enfrentan a la crisis empañada por relaciones atrofiadas por el rencor. La insensibilidad y la falta de valorización es la neblina que impide la visibilidad de los desafíos que ellos experimentan a diario en su entorno; por lo que están pagando las consecuencias y los estragos de la indiferencia, desigualdad, y falta de compromiso del País. Se conforma un triángulo entre el hogar, la comunidad y el país que simboliza la paradoja entre la vivencia diaria y el camuflaje de la realidad que se desenmascara con muertes violentas, violaciones, secuestros, negligencia, falta de prestación de servicios educativos y; maltrato físico y emocional.
Ante este panorama las iniciativas del Departamento de Educación y el Departamento de la Familia en Puerto Rico se enmarcan en el discurso contradictorio que alude a la transformación de un sistema educativo en el que puedan triunfar ante los nuevos retos de este siglo; porque son el futuro de este país. Además, de un compromiso de educar en familia apoyado en la promesa de la no agresión, respeto y tolerancia. Sin embargo, el único paso parece estar en las campañas publicitarias con frases elocuentes; aún cuando los eventos develan que sus voces están siendo silenciadas.
Urge abogar y exigir acciones porque las palabras se las lleva el viento y no podemos hacernos de la vista larga. Propiciemos oportunidades vivenciales en la escuela, el hogar y la comunidad para conversar, plantear alternativas, analizar eventos para sensibilizarnos y lograr que desarrollen herramientas, estrategias y llenen sus arcas de destrezas sociales y emocionales que le permitan encontrar su voz al hablar, y abogar por sus derechos.
Este proceso puede generarse a través de comunidades de aprendices virtuales que compartan, dialoguen, eduquen y comuniquen por medio de una bitácora electrónica (blog o weblog), periódicos y radio digital, o a través de redes sociales para mantener informados y concienciar a la ciudadanía a favor de la mujer y en contra de la violencia.
Reseñar los acontecimientos plasma la evolución de la cultura mediática al estrechar vínculos, relaciones y redes de movilización en la lucha por la educación a favor de la mujer y la niñez. Las y los cibernautas boricuas son las voces unificadoras con independencia de criterios, expertos en la tecnología, y buen uso del tiempo y los medios alternativos para recibir, emitir, crear y diseminar con veracidad, exactitud y criticidad sin sentir la coacción de la libertad de expresión categorizado como la democracia móvil.
Estas iniciativas brindan otra lección de aprendizaje a favor de los procesos pacíficos y vislumbran que la virtualidad es nuestra realidad, por lo que hay que promover el aula sin paredes en la sociedad del conocimiento que se comparte a través de la Internet para no perder la comunicación y mucho menos la conexión con nuestro País y lograr erradicar la violencia contra la mujer y la niñez.
Ante este panorama las iniciativas del Departamento de Educación y el Departamento de la Familia en Puerto Rico se enmarcan en el discurso contradictorio que alude a la transformación de un sistema educativo en el que puedan triunfar ante los nuevos retos de este siglo; porque son el futuro de este país. Además, de un compromiso de educar en familia apoyado en la promesa de la no agresión, respeto y tolerancia. Sin embargo, el único paso parece estar en las campañas publicitarias con frases elocuentes; aún cuando los eventos develan que sus voces están siendo silenciadas.
Urge abogar y exigir acciones porque las palabras se las lleva el viento y no podemos hacernos de la vista larga. Propiciemos oportunidades vivenciales en la escuela, el hogar y la comunidad para conversar, plantear alternativas, analizar eventos para sensibilizarnos y lograr que desarrollen herramientas, estrategias y llenen sus arcas de destrezas sociales y emocionales que le permitan encontrar su voz al hablar, y abogar por sus derechos.
Este proceso puede generarse a través de comunidades de aprendices virtuales que compartan, dialoguen, eduquen y comuniquen por medio de una bitácora electrónica (blog o weblog), periódicos y radio digital, o a través de redes sociales para mantener informados y concienciar a la ciudadanía a favor de la mujer y en contra de la violencia.
Reseñar los acontecimientos plasma la evolución de la cultura mediática al estrechar vínculos, relaciones y redes de movilización en la lucha por la educación a favor de la mujer y la niñez. Las y los cibernautas boricuas son las voces unificadoras con independencia de criterios, expertos en la tecnología, y buen uso del tiempo y los medios alternativos para recibir, emitir, crear y diseminar con veracidad, exactitud y criticidad sin sentir la coacción de la libertad de expresión categorizado como la democracia móvil.
Estas iniciativas brindan otra lección de aprendizaje a favor de los procesos pacíficos y vislumbran que la virtualidad es nuestra realidad, por lo que hay que promover el aula sin paredes en la sociedad del conocimiento que se comparte a través de la Internet para no perder la comunicación y mucho menos la conexión con nuestro País y lograr erradicar la violencia contra la mujer y la niñez.
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