Relata cómo persiguió a su compañera de 15 años hasta una finca en Añasco y supuestamente al verla con otro hombre los baleó
Por Ricardo Cortés Chico
Un hombre confesó hoy que asesinó a su compañera consensual por los pasados 15 años y a su acompañante en un aparente ataque de celos ayer en una finca de Añasco.
La fiscal de distrito Blanca Portela informó que Manuel Rivera Cruz, de 39 años, relató a los fiscales e investigadores del doble crimen cómo asesinó a la madre de su hija María De Lourdes Cortez Rosado, de 45 años, y a Jesús María Candelario Perea, de 60.
Según contó el presunto asesino, ayer durante el día persiguió a Cortez Rosado hasta una finca ubicada en el barrio Carreras donde vio que su pareja se encontró con Candelario Perea.
Al ver a la mujer entrar en su auto hacia la finca, Rivera Cruz, según narró, la siguió a pie, observó el encuentro y al verlos darse un beso sacó un arma para la que no tenía licencia y los mató.
Rivera Cruz regresó hoy al lugar del crimen junto a los fiscales e investigadores y recreó la escena del crimen. Allí, según la fiscal general Portela, dijo que primero hirió de un disparo a Candelario Perea, luego mató a su compañera, y entonces acabó con la vida del hombre.
Luego, rompió el arma con un bloque, la lanzó por un risco y regresó a su casa. En la noche, cuando la hija de 11 años de la pareja comenzó a preguntar por su mamá, decidió ir con la niña y con otro hijo de la mujer a reportarla desaparecida.
Una vez en el cuartel, coincidieron con una hija de Candelario Perea que fue a reportar la desaparición de su padre, que tenía tres hijos y estaba casado.
El hallazgo ocurrió a las 10:30 de anoche. Desde el inicio, los agentes del CIC de Mayagüez sospecharon que se trató de un crimen motivado por celos.
La fiscal general Portela indicó que el hombre permitió ser grabado mientras recreaba la escena y firmó una declaración jurada sobre su confesión.